Quien no esta preparado hoy
lo estará menos mañana
Todos sabemos que el cerebro es uno de los órganos más valioso de los seres humanos ya que se encarga de las funciones cognitivas y emotivas y del control de actividades vitales como los movimientos, el sueño, el hambre, etc. Pero, lo más importante es que en él se concentra la capacidad de aprender, retener y tomar decisiones cada segundo, y lo mejor es que permite acumular conocimientos y experiencia para desarrollarnos ampliamente en lo que deseemos. Todos también sabemos, que el cerebro es la mente en las personas que ayuda a pensar y a resolver problemas, de modo que si lo alimentos con cosas negativas, la respuesta a todo será negativo. Si lo nutrimos con cosas positivas, nuestra vida será una maravilla. El cerebro es entonces como un depósito, ya que en él se guarda o registra absolutamente todo lo que sucede con uno mismo y nuestro rededor. Es por ello que debemos tener mucho cuidado qué es lo que depositamos en él. Convertimos nuestro cerebro en un basurero cada vez que pensamos cosas malas, o nos agredimos verbalmente a uno mismo y a los demás. El estar todo el tiempo pensando en cosas negativas como lo mal que nos va en la vida, los malos jefes que tenemos, que la empresa en la que trabajamos nos explota, que no nos paga lo justo, o el envidiar constantemente a los que pensamos son mejores o que viven en mejores condiciones, el estar siempre viendo todo lo negativo es como estar echando basura a nuestro cerebro. Un cerebro lleno de esta basura no nos dejará pensar con positivismo e inteligencia. Dejemos de andar de mal pensados, criticando sólo por criticar a los demás sin fundamento alguno, y de crear conflictos sin antes construir una solución. Todas las cosas que nos perjudican y dejamos que entren a nuestro cerebro se convierten en basura, por lo tanto, debemos dejarla fuera, para que siempre este limpio, y lleno de cosas positivas que nos motiven a tener días alegres toda la semana. Celar al alguien, o envidiarlo, odiarlo, no querer ayudarlo a superarse, o simplemente colaborar con él o ella, es una forma de meter basura al cerebro, ya que eso nos estará haciendo sentir mal todo el tiempo. Lo mismo cuando no nos sentimos satisfechos por no haber logrado un fin o una meta, ese disgusto es basura que ronda nuestro pensamiento 24 horas al día. Todo lo que no nos genera una actitud positiva en el acto es basura que debe ser desechada lo antes posible. Póngase un letrero mental que diga “Prohibido tirar basura”, y su vida mejorará notablemente. Deposite en él sólo pensamientos buenos, conocimientos que le permitan progresar constantemente; pero sobre todo debemos depositar todo el tiempo frases de amor, de cariño y respeto, por uno mismo, los demás, y el mundo que nos rodea.