Quien no esta preparado hoy
lo estará menos mañana
Todos creemos que el equilibrio perfecto en una persona es tener buena salud, dinero suficiente para vivir desahogados, y desde luego que el amor de una pareja, hijos, familia y de los amigos. Quien posee estos tres ingredientes podríamos asegurar que es feliz, o al menos, tiene menos cosas de las que mortificarse, porque nunca falta que otros impidan que se pueda gozar de este equilibrio. Pero, para que podamos alcanzar un buen resultado, a la ecuación hay que agregarle el factor tiempo, ya que éste se ha convertido en algo difícil de controlar y de aprovechar ante el crecimiento de las ciudades y las cada vez más complejas relaciones humanas en una sociedad asombrosamente diversificada. Y es que hoy en día, cada manera de pensar se manifiesta en pequeños, medianos o grandes grupos de personas, conformando complicados tejidos sociales y a los que se les debe respetar las cada día más exigentes normatividades de derechos humanos, lo que es muy razonable. En la actualidad, la mayoría de la gente se la pasa pensando cómo ganar más dinero, soñando en ser millonarios, porque el dinero se ha convertido en la única manera de adquirir bienes y servicios para vivir, incluyendo en mucho la necesidad de curar una enfermedad crítica y cara. Es por ello que la salud es el principal componente de la ecuación porque sin ella no se puede hacer nada. Para gozar de buena salud se necesita llevar una buena alimentación y una adecuada rutina de ejercicios o hacer deporte; pero, sin el dinero suficiente no se pueden comprar los alimentos necesarios para tener una alimentación balanceada. A esto hay que agregar la falta de tiempo que nos hace comer a deshoras, y que no nos permite ir al gimnasio o simplemente a caminar. Si no se tiene espíritu deportista o de atleta difícilmente vamos a encontrar ese tiempo, ya que no hay interés. Hay quienes tienen mucho dinero y buena salud, pero se sienten amargados porque no tienen alguien que los ame, ya sea una pareja o una familia. Enamorarse es fácil cuando va de por medio el deseo sexual, pero éste es sólo una pequeña parte de lo que realmente significa un matrimonio, la formación de una familia, o una simple relación de pareja. La parte sexual como acto en que tienen que estar presentes ambos, no es ni el uno por ciento de todo el tiempo que deben compartir y convivir en pareja con los hijos y el resto de los familiares. Sin duda, hay muchas personas casadas, con familia, pero apenas se ven a ratos durante el día porque no tienen tiempo, ya sea por el trabajo o porque tienen cosas que hacer. Cada día resulta más difícil que nuestra ecuación “Salud, Dinero y Amor” se mantenga en un equilibrio que nos permita vivir tranquilos. Ya sea por la complicación de las relaciones humanas, o por la falta de tiempo que ocasiona el crecimiento de las ciudades y los compromisos de trabajo. Pongamos atención al factor tiempo en nuestras vidas para mantener la ecuación en el mejor de los equilibrios.